Una comitiva de dirigentes de la conducción de la CGT le pidió al ministro del Interior, Guillermo Francos, una reunión “urgente” para este mismo jueves por la tarde a los efectos de expresarle su más enérgico repudio en relación con el DNU dado a conocer en la noche del miércoles por el presidente Javier Milei, el cual, entre muchas otras cosas, propone una profunda reforma laboral.

Uno de los participantes será el titular de la UOCRA, Gerardo Martínez, quien fue el que pidió la reunión, según pudo saberse desde ámbitos oficiales.

El DNU desató un malestar generalizado en el gremialismo e incluso uno de los cotitulares de la CGT, Héctor Daer anticipó que "hay clima para un paro". Además, confirmó que irán a la Justicia contra el decreto de necesidad y urgencia que anunció Milei.

X de Héctor Daer

"Vamos a unificar un criterio con el bloque de diputados de Unión por la Patria, tenemos que exigir que se retrotraiga esto rápidamente en términos políticos y lo vamos a plantear ante la Justicia", manifestó Héctor Daer, secretario general de la central obrera, en diálogo con Radio Diez.

El dirigente gremial, además, calificó de "antirrepublicano" y "antidemocrático" el uso del DNU para derogar leyes y artículos de algunas normas.

"Se ataca fuertemente la estabilidad laboral, derechos laborales y el sistema de salud. Que pongan a prepagas en igualdad de condiciones que las obras sociales significa una desregulación absoluta en favor de quienes tienen plata para tener un monopolio", puntualizó.

"El tema laboral es grave y lo vamos a defender, eso no pasa en la Justicia laboral ni loco", sentenció Daer.

En una improvisada rueda de prensa, a Daer se le preguntó una y otra vez si la CGT evalúa realizar un paro general. Y si bien evitó confirmarlo, el dirigente dejó una frase que marca el clima de tensión: "Cómo no va a haber clima para paro", sentenció.

Chicana de ocasión

Finalmente, a Daer se le cuestionó si una eventual medida de fuerza era justa "después de no haber hecho ningún paro general en cuatro años" de la gestión de Alberto Fernández. 

La respuesta fue contundentes: "Durante cuatro años no se tocaron derechos, no se regaló Aerolíneas (Argentinas), no se privatizaron las empresas públicas, no se destruyó el salario a partir de una devaluación vergonzosa, que es una transferencia directa. Por eso no hicimos nada", concluyó.