La relación entre el Gobierno nacional y algunos gobernadores quedó pendiendo de un hilo en la noche del martes, cuando por “falta de apoyo” opositor en la Cámara de Diputados, el oficialismo debió dar marcha atrás y volver a “foca cero” lo poquito que ya había quedado de la Ley de Bases.

El malestar principal de Javier Milei fue para con los mandatarios de Santa Fe y Córdoba, Maximiliano Pullaro y Martín Llaryora, respectivamente, de quienes La Libertad Avanza esperaba un apoyo casi incondicional, que al final nunca llegó.

Al respecto, Pullaro dijo este miércoles que "el gobierno al tener minorías en ambas Cámaras, tendría que profundizar el diálogo". "Nosotros estamos dispuestos a hablar, nunca vamos a agredir a nadie ni a menospreciar una posición política", señaló Pullaro, al tiempo que afirmó: "La democracia es la construcción de consensos y de escuchar al otro".

En ese sentido, apuntó: "Estamos de acuerdo en que el Estado debe ser eficiente, y en que debe reducir el déficit fiscal. Pero bajo ningún concepto vamos a acompañar una reforma que se lleve puesta la producción santafesina, porque ese fue nuestro compromiso también de trabajo", acotó.

"Estamos dispuestos a dialogar para encontrar salidas al déficit fiscal y reducir los niveles de inflación; pero nuestra provincia también tiene que tener los recursos para las obras que tenemos que llevar adelante", remarcó Pullaro.

"Tal cual le manifesté al ministro (de Economía, Luis) Caputo y al ministro (del Interior, Guillermo) Francos, estamos dispuestos a dialogar para encontrar salidas al déficit fiscal y reducir los niveles de inflación; pero nuestra provincia también tiene que tener los recursos suficientes para brindar los servicios necesarios y las obras que tenemos que llevar adelante", remarcó.

Todo bien, hasta ahí

Con el presidente Javier Milei de gira por Europa, los encargados de “poner la cara” luego de la derrota parlamentaria que tuvo el Gobierno el martes por la noche fueron el ministro de Economía, Luis Caputo, y el vocero presidencial, Manuel Adorni.

En su habitual conferencia de prensa con los medios, el portavoz dijo que no metían a todos los mandatarios “en la misma bolsa”, al tiempo que negó que vayan a echar funcionarios ligados a las provincias. 

Sin embargo, y en una clara muestra de que la relación entre el Gobierno y algunos gobernadores quedó debilitada, Adorni confirmó que se terminó suspendiendo la reunión que tenían previsto para este miércoles entre Luis Caputo y Maximiliano Pullaro.

Finalmente, el vocero presidencial negó el desplazamiento de funcionarios vinculados a las provincias, cuando hay terminales de la administración nacional ocupadas, por ejemplo, por personas ligadas al cordobés Martín Llaryora, uno de los que está en el foco de las quejas de Balcarce 50. 

“No está en agenda ningún cambio, las cuestiones de gestión las vamos a separar de las cuestiones políticas. Si hay cambios, serán por cuestiones de gestión, no políticas”, aseguró Adorni.

El tiempo tendrá la última palabra.