Una familia conformada por dos adultos y dos menores de edad necesitó en diciembre ingresos por casi 500 mil pesos para no ser considerada en situación de pobreza, según informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

El informe oficial indica que el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) subió 30,1% en diciembre, lo que determinó que una familia conformada por dos adultos y dos hijos menores necesitara ingresos por al menos $240.678 para no ser indigente.

De esta forma, a lo largo de los doce meses de 2023 el costo de la canasta alimentaria acumuló un incremento de 258,2%.

Por su parte, el costo de la Canasta Básica Total (CBT) subió 27% el mes pasado, por lo que el mismo grupo familiar necesitó contar con ingresos por $495.798 para no ser considerada en situación de pobreza.

Donde más duele

Al compararse estas canastas con el índice de inflación que publicó el Indec la semana pasada que en diciembre fue de 25,5%,  y en el año de 211,4%, queda de manifiesto el impacto de los aumentos de precios en los rubros más sensibles que pegan en los sectores más desprotegidos.

Por ejemplo, la canasta de indigencia aumentó 46,8 puntos porcentuales más que el índice de inflación general de 2023, un 15% más términos reales. También creció por encima de la inflación de alimentos y bebidas, que fue del 251,3%.

Esto generará que cuando se conozca el índice de pobreza e indigencia con el que finalizó 2023, allá por  fines de marzo 2024, los indicadores exteriorizarán que la pobreza y la indigencia habrán aumentado significativamente.