El diputado de Juntos por el Cambio, Gerardo Milman, investigado por la Justicia Federal por haber estado al tanto del intento de magnicidio que se perpetró el 1º de septiembre de 2022 en contra de la vicepresidenta Cristina Fernández, presentó este miércoles un escrito en el cual sostuvo que el teléfono celular que él usaba en aquellos días se le “extravió en una mudanza”.

"En primer lugar no tengo nada que ocultar en relación a los hechos ventilados" en la causa, sostuvo Milman en el escrito presentado en el juzgado federal a cargo de la jueza María Eugenia Capuchetti, quien tiene delegada la investigación en la fiscalía de Carlos Rívolo.

Milman dijo "no poseer el aparato telefónico que se intenta secuestrar, ya que fue extraviado en una mudanza".

Acto seguido, Milman dijo "no poseer el aparato telefónico que se intenta secuestrar, ya que fue extraviado en una mudanza junto a otros elementos", según el escrito al que tuvo acceso la Agencia de Noticias Télam.

"Vengo a ponerme a disposición de la justicia, permitiendo el ingreso a mi domicilio", agregó Milman en virtud de que el 1 de noviembre la fiscalía ordenó peritar todos sus celulares".

A principios de mes la comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados emitió dictamen favorable a un pedido de autorización del juzgado para allanar el domicilio de Milman en busca de tres teléfonos que, según la querella, usaba al momento de los hechos.

Esto ocurrió ante el reclamo de la querella de la Vicepresidenta, que detectó que la defensa del legislador del PRO entregó a la Justicia un aparato adquirido después de los hechos y que no era el que utilizaba al momento en el cual según un testigo habría pronunciado la frase "cuando la maten, yo voy a estar en la Costa", dos días antes del hecho.

Preso de sus palabras

La denominada "pista Milman" se abrió el 23 de septiembre del año pasado: esa tarde un asesor del Frente de Todos (FdT) en la Cámara de Diputados, Jorge Abello, se presentó en la Justicia y dijo haber escuchado al legislador opositor referirse al atentado antes de que ocurriera.

"Cuando la maten yo estoy camino a la Costa", fue la frase que Abello dijo haber escuchado decir a Milman en un bar del centro porteño.