Mientras que Javier Milei, su ejército de trolls y el grupo de escaladores que lo rodea pretenden distorsionar la realidad celebrando sus pretendidos “éxitos económicos”, su gobierno cruje. 

Como en el relato popular, “el rey está desnudo”, pero nadie en su entorno se anima a advertirle. 

Los números que salieron a festejar con su Ministro de Economía, “Toto” Caputo, no son un éxito de recaudación, sino la confirmación de la catástrofe que le han impuesto a la Argentina. El presidente ha perdido más de 9 puntos de respaldo en apenas 2 meses de gestión y sus políticas económicas han propiciado una inédita inflación en dólares. 

En términos reales, la inflación de los primeros dos meses de gobierno ha sido superior al 42%, se han desabastecido los comedores populares, se ha castigado brutalmente a los jubilados y pensionados, la pobreza y la indigencia han alcanzado cifras nunca vistas, buena parte de las Pymes están a punto de cerrar o ya lo hicieron, la economía está paralizada, la calidad de vida de casi todos los argentinos ha implosionado, y en estas condiciones el gobierno se apresta a incrementar todas las tarifas, a niveles estratosféricos, en el mes de marzo. 

Tan grave es la situación que el propio FMI, de manera inédita, ha debido llamarle la atención sobre dos temas primordiales: las jubilaciones y el gasto social. Menos Milei y los grandes empresarios beneficiarios de sus políticas de saqueo y concentración de la riqueza, tanto aquí como en el exterior la única pregunta que todos se formulan es si este gobierno puede durar y, en caso afirmativo, por cuánto tiempo. 

Mientras que Javier Milei, su ejército de trolls y el grupo de escaladores que lo rodea pretenden distorsionar la realidad celebrando sus pretendidos “éxitos económicos”, su gobierno cruje. Como en el relato popular, “el rey está desnudo”, pero nadie en su entorno se anima a advertirle.

El ultimátum del gobernador de Chubut, Ignacio Torres, exigiendo que el gobierno nacional ejecute la coparticipación antes del próximo miércoles, o discontinuará el envío de gas y de petróleo, rápidamente fue respaldado por todos los gobernadores de Juntos por el Cambio. El respaldo de los de UxP ha sido tácito o explícito. 

Yo, contra el sentido común

La respuesta de Milei, a través de la cuenta de la “Oficina del Presidente” ha sido tan absurda e irracional como el resto de sus actos. No le alcanzó con tildar a Torres como “chavista”, sino que eligió también como blanco a otros dos firmantes, Jorge Macri y Rogelio Frigerio, quienes a su juicio "deben entender que la Argentina eligió un cambio. Se acabó la era en que la casta malgastaba los recursos de los argentinos y luego iban a pedir limosnas al Banco Central a cambio de favores políticos".

Por si fuera poco, el posteo agrega que, "de ninguna manera el Poder Ejecutivo Nacional contribuirá al financiamiento del despilfarro de las provincias que se niegan a bajar gastos innecesarios, eliminar cargos políticos prescindibles y gobernar con la austeridad que la crisis económica heredada requiere".

Milei no entiende las normas de la democracia porque la desprecia. Su matriz autoritaria e irracional lo lleva a definir como “nido de ratas” al Congreso; al radicalismo como “putitas del peronismo”; a los gobernadores como “comunistas”, y a la sociedad argentina como la víctima de un sanguinario experimento macroeconómico para el que no se lo votó. 

Milei no entiende las normas de la democracia porque la desprecia. Su matriz autoritaria e irracional lo lleva a definir como “nido de ratas” al Congreso; al radicalismo como “putitas del peronismo”; a los gobernadores como “comunistas”, y a la sociedad argentina como la víctima de un sanguinario experimento macroeconómico para el que no se lo votó. 

Su ajuste iba a ser sobre la “casta”. ¿Son la casta los niños, los jubilados, los pobres, los indigentes, las clases medias que destruyó, los docentes, los trabajadores públicos y privados, el tendal de despedidos que provocó?

Tan grave es la situación que incluso los gobernadores más conservadores del radicalismo y del PRO convalidaron el documento de Torres, o que Mauricio Macri tirara la toalla de la negociación afirmando que no se puede acordar nada con Milei y su gobierno. 

Del otro lado del tablero político, el PJ se reunió para desplazar a Alberto Fernández y reemplazarlo por una “conducción horizontal”, y todo el universo del movimiento piquetero dejó de lado sus rencillas y enfrentamientos para unificarse en su plan de lucha. 

¿Qué hará Milei en caso de que se concrete el ultimátum de Torres y se sumen a su medida el resto de las provincias patagónicas? ¿Las intervendrá a todas, pasando por encima del Congreso? ¿Qué curso tendrá el tratamiento del Mega DNU inconstitucional en las Cámaras y en la Justicia? ¿Se activará el juicio político sobre el fundamento de la “insanía mental” del presidente? ¿Lo respaldará el FMI a pesar de que su Directorio tenga en claro que se dirige a la catástrofe?