Con un fuerte dispositivo policial tras la feroz represión del jueves, el Congreso se apresta a reanudar la sesión por el tratamiento de la Ley Ómnibus. Desde las 10, el pleno volverá a reunirse tras el cuarto intermedio de anoche.

Se espera que unos 16 oradores hagan uso de la palabra, para luego pasar a la votación en general. Acto seguido, comenzará el debate artículo por artículo, algo que podría extenderse por el fin de semana.

Con un dictamen negociado hasta última hora, el oficialismo realizó una contrapropuesta a los bloques dialoguistas y busca encaminar la negociación en dos artículos clave: facultades delegadas y privatizaciones. 

De esta manera, el Ejecutivo se aseguraría el voto de este grupo -al menos en estos artículos- al momento del voto en particular.

Entre las novedades que ofrece el nuevo documento hubo una sorpresa y fue la inclusión en el capítulo las facultades en seguridad. Del proyecto original, que traía 11 facultades, quedaron seis: económica, financiera, tarifaria, energética, de seguridad, fiscal y administrativa.

Otro de los ejes en los que La Libertad Avanza cedió fue en el plazo de duración de los “súperpoderes”, que pasó de dos a un año de plazo. Los más reacios a darle luz verde a este punto son aquellos radicales que están bajo el ala de Facundo Manes. La Coalición Cívica ya anunció que votará en contra.

El capítulo privatizaciones volvió a retacearse: de 36 empresas estatales a privatizar, el oficialismo propone que sean 27, conservando las 3 privatizaciones parciales que incluyen el Banco Nación, Nucleoeléctrica y ARSAT. YPF quedó fuera del paquete.

Entre las 7 empresas que salieron se encuentran: BICE, Casa de la Moneda, Fabricaciones Militares, Radio de la Universidad Nacional del Litoral, Radio y Televisión de Córdoba, Vehículo Espacial Nueva Generación y Yacimientos Mineros de Agua Dionisio.