Es argentino, vive en Miami, tiene una foto con Beckam, y es señalado como líder de la barrabrava del equipo que en pocos días será la nueva casa de Lionel Messi.

Jorge “Cachito” Cascardo atiende la videollamada desde el living de su casa y dialoga unos minutos con Canal Extra.

“¿Hay canción de cancha para Messi?”, le preguntan. Cachito piensa y responde como si estuviera sentado en una pizzería de la 9 de Julio: “Para Messi todavía no, pero tenemos un montón”. Y arranca con una melodía bien arriba en el ideario argentino: “Muchachos, juega el Inter, lo vinimo’ a ver. Pongan huevo jugadores, hoy no podemos perder”.

Hasta ahora, una expresión de deseo. El Inter marcha último entre los 12 equipos de la conferencia oeste, con sólo 4 victorias en 17 partidos. Pero Cachito, como todo hincha, lo relativiza: “Estamos mal, no le ganamos a nadie. Pero acá no hay descensos. Y ganando cuatro partidos te acomodás”.  

¿Y cómo no se van a acomodar, si en unos pocos días nomás va a estar llegando el todavía número uno del mundo? Nadie se animaría a dudarlo ni un segundo. Mucho menos Cachito, que ya luce las dos variantes de la camiseta del Inter de Miami. “Esta la negra y está la rosa también. Me gusta más la negra”, cuenta el argentino, mientras muestra las casacas con la 10 en la espalda y la inscripción del nombre del astro argentino, y que ya se consiguen a 140 dólares”.

De su pasado en Argentina, Cachito cuenta que frecuentaba la popular de All Boys, y que era parte de los barras que se reunían seguido con los dirigentes. Costumbre que también llevó La Florida al adoptar su nuevo club.

Fundar una hinchada

“Sí, me junté con Beckam”, dice, sobre el propietario e impulsor de la nueva casa del astro argentino. “Cuando arrancamos, hace cinco años, que se armó el Inter de Miami, con otros chicos que estaban conmigo resolvimos sumarnos, para darle color y formar una hinchada. Y Beckam se entusiasmó y nos recibió porque le gustaba lo que estábamos haciendo”.

Hoy la barra del Inter cuenta con un interesante inventario de diez bombos, tres trompetas, seis redoblantes y cuatro repiques, según indica orgulloso el barra argentino, que también habla de las canciones que bajan desde la tribuna. “Tienen una onda muy argentina. Y desde el inicio le dimos a Beckam nuestro parecer”, recuerda.

"Todos van a querer venir a ganarle al Inter de Messi"

El resultado de esas reuniones tuvo correlato inmediato en la manera en que se diseño el todavía modesto estadio del Inter, ubicado en Fort Lauderdale, al norte de la ciudad, y con capacidad para unos 18 mil espectadores. “Le dijimos que los paravalanchas tenían que estar. Entonces cerraron toda nuestra parte, para que esté la hinchada esté ahí. Los demás lugares son todos sentados, pero a nuestro lugar lo respetaron, por suerte, porque entendieron un poco el folklore argentino”, comenta Cachito.

A qué fútbol llega Messi

El torneo de la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos está organizado en dos zonas o Conferencias: Este y Oeste. Cada una, compuesta por 12 equipos. “Ahora, con Messi, obviamente cambia todo, y más con la compañía que viene con él”, define el barra argentino, con un nivel de manija bastante fundado: “Nos vamos a ir para arriba, vamos a estar tirando primeros puestos. Y si no es así, con entrar a los playoffs ya estamos”. En esa instancia, se dan cruces contra los clasificados de la otra conferencia, y se van eliminando hasta consagrar al campeón. “Tenemos todo para coronar”, dice Cachito.

La presión europea de la que prefirió “huir” Messi es muy distinta en las canchas norteamericanas. Las barras son otra cosa, los medios, las dirigencias también. “Acá tenemos que portarnos bien, porque vos tirás un vaso de cerveza y le pega a alguien, llaman al de seguridad y no vas más a la cancha por un año. Y si le pegás a un nene vas preso”, describe el barra.

Lo mismo pasa con los insultos. “Puteadas, hasta ahí nomás, porque ya te empiezan a decir que paren un poco. Nos ha pasado porque íbamos últimos y nos teníamos que cuidar. A lo sumo: ‘jugadores pongan huevo’ y esas cosas”, cuenta.

Con Busquets y Jordi Alba ya anotados en el equipo que comandará Messi, lo que está faltando es el fichaje de un nueve que lo acompañe. El sueño es el uruguayo Luis Suárez, a quien buscan tentar para que vuelva de su reciente retiro.

De cualquier modo, lo que le espera a Messi es un fútbol de mucho despliegue físico. “Es un fútbol muy rápido, atlético. Acá no tienen cracks, pero corren hasta en el entretiempo”, comenta Cachito, convencido de que desde el fichaje más rimbombante de toda la historia de la MLS, “todos van a querer venir a ganarle al Inter de Messi”.

“Vamos a hacer todo lo posible”

Las vacaciones del hombre que levantó la tercera copa para Argentina ya se acabaron, y la cuenta regresiva para su debut, el 21 de julio contra el Cruz Azul de Méjico, no se detiene. La ciudad está revolucionada, las imágenes del rosarino ya se han convertido en murales, y la atención de todo el planeta fútbol parece, por primera vez en la historia de este apasionante deporte, depositarse en una liga que promete dar el gran salto.

"Todos van a querer venir a ganarle al Inter de Messi"

“Vamos a hacer una gran fiesta en el club, porque él se lo merece. La familia de él se lo merece”, se entusiasma Cachito, quien asegura: “Acá va a estar tranquilo, va a esta en paz y va a estar en una ciudad que es maravillosa, donde tenés sol todo el año, donde va a poder ir a la playa todo el año. La ciudad perfecta donde se tiene la va a pasar muy bien seguramente. Desde este lado, vamos a hacer todo lo posible”, concluye.